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Imaginemos que estamos delante de una olla grande. Empezamos a llenar esta olla con personajes en cierto modo reales, intriga, misterio, un buen chorro de inteligencia y maestría, que esto corre a cargo del autor, y gracias a las palabras de una docente que anima a un alumno a escribir, una alumna que crea una fantástica portada y una historia con una trama… ¡Guau!
Voalá, acaba de salir el libro. Su nombre es Enredado en sus sueños. Y su autor Randy Sandí Castro.
Vamos a conocerlo.
Randy Sandí Castro: (1988). Nacido en San José, Costa Rica.
Soy un docente de Estudios Sociales y Educación Cívica. Estudié en la Universidad de Costa Rica, obteniendo en el 2011 el grado de Bachillerato en la Enseñanza de los Estudios Sociales y la Educación Cívica. Para el 2012 inicié a trabajar en el sector privado, siendo docente en diversos colegios del país. Actualmente me encuentro laborando en el Centro Educativo Costa Ballena, en Uvita, Puntarenas, una institución que representa uno de los lugares más multilingüe y diverso culturalmente del Pacífico Sur de Costa Rica, la cual cuenta con estudiantes y trabajadores de todo el mundo.
En el 2018 decidí retomar los estudios, logrando graduarme en el 2019 en la Universidad Americana, con el grado académico de Licenciatura en Ciencias de la Educación con énfasis en la Enseñanza de los Estudios Sociales. Fue en este proceso donde una profesora de cursos y tutora de tesis, además de darme excelentes comentarios sobre su forma de redactar, me impulsó a escribir. De esta manera decidí enfrascarme en la tarea de crear mi primera novela titulada Enredado en sus sueños, un thriller psicológico en la cual logro combinar dos de mis mayores pasiones, el suspenso y la investigación, complementando la historia con mis experiencias del mundo onírico.
Mi meta es obtener en los años próximos un título universitario en la disciplina de Ciencias Criminológicas, ya que actualmente me encuentro estudiando dicha carrera en la Universidad Libre de Costa Rica.
María: Sé como está el tema libros en mi país pero cada vez que aparece un autor de otro país me gusta saber como está el tema libro en el suyo. (si la gente es muy lectora, que género es el que más se suele leer…, lo que quieras contar Randy.) Y por favor, recomiéndame un libro de tu país.
Randy Sandí Castro: Lastimosamente el grado de lectura en América Latina es muy bajo. Sé que España, en cuanto a los países de habla hispana, está a la cabeza en el índice de lectura por año.
Hablando propiamente de mi país, Costa Rica, un estudio revela que cerca del 43% de los costarricenses lee 6 libros cada año. Creo que son indicadores regulares, siendo un reto o un desafío mejorar los hábitos de lectura y atraer el interés de las personas hacia esta. Si bien, la lectura es promovida desde la educación y se da promoción de obras por parte de editoriales en el país, aún el mercado y las posibilidades para los escritores son muy limitadas. También, debo agregar que muchas veces la lectura se da más por obligación académica que por gusto o interés propio.
En cuanto a los géneros más leídos, indiscutiblemente es de ciencia ficción, fantástico, romántico, histórico y policiaco.
Un libro que recomendaría de mi país, es sin duda “En una silla de ruedas” de la autora costarricense Carmen Lyra. Una novela muy trágica y con mucho sentimiento en la cual se denuncia el valor que se le otorga a la institución familiar.
En vida luchó para que no silenciaran sus gritos de auxilio. Ahora, donde se encuentra, el silencio es su mejor compañía.
Todo data del día 23 de agosto del 2019. Ese viernes por la noche Dylan se sumergió en un profundo sopor a pocos minutos de haberse acostado, entrando así en uno de esos característicos sueños en los que visita lugares que le proporcionan un estado de paz y tranquilidad. En ellos percibe y distingue carreteras, casas, edificaciones, paisajes, ríos e incluso sonidos y olores, pero no logra recordar dónde se encuentran o si los ha visitado físicamente, atribuyéndolo a recuerdos de su infancia o de probables vidas pasadas.
Algo muy característico de estos episodios es que no son para nada lúcidos, lo que significa no ser consciente de estar en ensueño, por lo cual no puede controlarlos. No obstante, los sitios que recorre, muchas veces repetidos, están relacionados entre sí. A pesar de que puede recordar esos detalles una vez que despierta y su memoria los evoca como escenas de una película, no le sucede lo mismo con las personas, quienes se muestran como simples rostros sin relación aparente con su vida.
Esta vez se encontraba en un pequeño pueblo en el que, aunque era la primera vez que lo visitaba, recorrió el camino empedrado de forma muy natural. En su interior conocía perfectamente hacia dónde quería o debía dirigirse, como si no fuera él quien manejaba su cuerpo sino los recuerdos de alguien más. Sentía un impulso y una necesidad de buscar algo o más bien a alguien. Claramente tenía la sensación de que precisaban de su ayuda o de que le reclamaban algo. Fue así como llegó a una vivienda humilde, alejada del pueblo y cercada por un absoluto silencio.
Era una casa lúgubre, sencilla y solitaria, con un armazón de madera marcado por los embates del tiempo. La espesa neblina a su paso le daba un aspecto muy misterioso. Dylan sentía que algo ajeno a sí mismo lo invitaba a entrar a los aposentos de ese hogar, pero al intentar ingresar, unos gritos de desesperación pidiendo ayuda hicieron que se despertara inmediatamente.
La voz le resultó conocida…
Randy Sandí Castro. Enredado en sus sueños.
María: Cómo te sentiste cuando te dijeron: —¿Es usted Randy Sandi Castro? Queremos publicar su libro.
Randy Sandí Castro: En cuanto a la publicación. Mi libro lo autopubliqué con Letrame, una editorial de auto publicación.
Sin embargo, puedo comentar que envié el libro a muchas editoriales y el 90% de los comentarios fueron sumamente positivos, de forma constructiva y muchos consejos, por lo cual me sentí muy feliz, ya que el escribir siempre fue un sueño muy lejano, el cual estoy cumpliendo a paso lento pero seguro.
María: Ah, estaba equivocada, creí que Letrame era una editorial de publicación tradicional. Bueno, vamos a seguir, estoy deseando que me contestes a esta pregunta. Tu novela es un thriller, pero, ¿qué tipo de thriller?
Randy Sandí Castro: Es un thriller psicológico, donde la venganza se convierte en el tema central, el peligro acecha sigilosamente día y noche, los personajes se escudan en secretos y se rodean de traiciones y los giros inesperados mantienen al lector sumergido en el relato, ya que hasta el último segundo queda al descubierto lo que por tanto tiempo se ocultaba detrás de los velos de la mentira. Asimismo, roza el mundo paranormal, ya que me serví de este elemento para complementar la novela, pero no la determina.
En pocas palabras la definiría como un ineludible partido de ajedrez donde el silencio de muchos jugó en contra de Dylan, personaje central, sin embargo, sus mayores trebejos, además de la intuición y perspicacia, fueron los recuerdos que le regalaron algunas “visitas inesperadas” usando sus episodios de ensueño como conductos.
De esta forma la historia inicia cuando se logra relacionar el aparente suicidio de Sara, en el 2019, con una serie de acontecimientos ocurridos 15 años atrás, mismos que irrumpen en la vida de Dylan por medio de repetidas misivas y acertijos que la chica fallecida le da a través de sus apariciones, instigándolo a sumergirse en una búsqueda frenética, impredecible y riesgosa de respuestas, donde en conjunto con sus amigos y cómplices debe descubrir quiénes estaban detrás de los homicidios sucedidos en los años anteriores, así como determinar quién es el responsable de que la muerte de Sara terminara pareciendo un acto voluntario en contra de su propia vida. Para Dylan es más que perceptible que los sucesos del pasado, enterrados por su entorno cercano, se entrelazan fuertemente con su presente.
María: Para entender esta historia tendremos que tener muy en cuenta a los personajes. ¿Cómo son tus personajes? ¿Podrías hablarnos de algunos de ellos? Estoy muy interesada.
Randy Sandí Castro: Primero que nada, quiero mencionar que los personajes fueron inspirados en personas reales y cercanas, usando de esta forma la personalidad de excompañeras y compañeras de trabajo, familiares y amistades para poder darle forma a cada uno.
Dylan, el personaje principal, es inspirado en mi persona, siendo un docente de Historia, muy sagaz y perceptivo, pero algo imprudente. Él deberá reunir las pistas que obtiene, por medio de sus sueños y otros episodios oníricos, para descubrir la verdad y desenmascarar al o los culpables.
Paula, la profesora de Psicología y compañera de trabajo de Dylan, es inspirada en una excompañera de trabajo. Es un personaje muy seguro de sí misma, la cual se convierte en una ayuda muy importante en la búsqueda de respuestas, aunque su participación es secundaria.
Para finalizar, dos de los personajes principales son Vicky, su amiga inseparable, la cual, junto con Daniela, su vecina, estarán siempre presentes para aconsejar y guiar a Dylan.
Junto con estos personajes, aparecen los familiares de Dylan, quienes enterraron muchos acontecimientos del pasado, los cuales se relacionan con hechos del presente, por lo cual, deberá de emprender una investigación riesgosa y frenética, hasta dar con la verdad.
Cuando por fin emprendió su viaje al mundo nocturno, la alerta de una extraña presencia en su cuarto lo invadió, compañía que más que miedo le generaba melancolía. Dylan se encontraba consciente auditiva y táctilmente, siendo incapaz de moverse o suscitar palabra alguna, lo que le provocó mucha zozobra y un efecto de vulnerabilidad e indefensión, pero a la vez, tenía el presentimiento de que esa entidad que percibía no quería hacerle daño.
Indudablemente, se encontraba sufriendo un episodio conocido como la parálisis del sueño, el cual es una incapacidad breve para realizar cualquier tipo de movimiento voluntario y está clasificado, según expertos, dentro de los trastornos del sueño en el grupo de las parasomnias. Muchas veces, esto se manifiesta junto con alucinaciones e incluso se pueden divisar sombras, ocasionando una sensación de gran angustia por un periodo de unos pocos minutos. La desesperación se acrecienta, ya que el individuo desea interrumpir el episodio o rogar por ayuda, pero le es imposible hasta que el trastorno decide abandonarlo.
En su caso, constantemente se le habían presentado como experiencias muy intensas donde alucinaba con frecuencias fuera de lo normal; voces, radios encendidos, y en ciertos momentos llegó a escuchar que le tocaban las ventanas y le gritaban cosas. Si bien nunca avistó figuras, como lo reportan muchos que la sufren, advertía cuerpos extraños que se acostaban a su lado.
Por mucho tiempo, los incidentes de este tipo se esfumaron como el humo de un pitillo en el aire, pero retornaron esa oscura y desolada noche, cuando aquella presencia deseosa de ejecutar otros planes se aproximó lentamente, susurrándole al oído: «Trata de recordarlo, debes hacerlo. Ella depende de ti; nosotras te necesitamos, pero ella se encuentra sola. Disculpa que irrumpí sin aviso ni permiso, era vital. Ya tengo que marcharme, por tu bien no debo estar acá». Esta vez la voz hizo un clic en su mente. Era la de Sara y no fue un grito de desesperación sino un mensaje de súplica.
Randy Sandí Castro. Enredado en sus sueños.
María: Me ha gustado mucho como has descrito a cada personaje. Otra pregunta Randy, ¿te gustaría poner en sobre aviso al lector con algunas escenas a la que le deberían prestar especial atención, o no se deben de perder nada para poder resolver esta historia?
Randy Sandí Castro: Es muy importante mencionar que los sueños y episodios oníricos que sufre Dylan, son los que le darán las pistas para descubrir al asesino, por lo cual, deberán prestar mucha atención a cada uno de estos episodios, ya que darán, además de acertijos, pistas para ir entendiendo la historia.
Como lo dice el nombre, Enredado en sus sueños, es una historia enredada, pero que capítulo a capitulo se irá descubriendo datos muy relevantes.
Sumado a esto, todos los personajes, casi en su totalidad, llegan a ser sospechosos y parecen ser el culpable, creo que eso hace atractiva la novela.
María: Te felicito por la portada. Me gusta mucho porque es muy original. Es un dibujo. ¿Quién es el ilustrador? Y ¿Qué intentaste expresar a través de la portada?
Randy Sandí Castro: En cuanto a la portada, me agrada demasiado y le da un toque de misterio. Como te mencioné, soy docente y una estudiante realizó la ilustración digital y me encantó. La estudiante se llama Valentina Siles, alumna de noveno grado.
De esta forma, presenté la imagen a la editorial y también les agradó, así que la usé.
En este momento me encuentro escribiendo mi segunda novela: “El rastro de Nía”, siendo la misma estudiante la que realizó la portada. Es en cierta forma algo similar, ya que quiero tener un sello propio en cuanto a las portadas.
María: ¿Este libro es un libro único, o es el primero de una serie?
Randy Sandí Castro: Por el momento creo que es un libro único, pero ciertas personas, que lo han leído, me están pidiendo una continuación, por lo cual, no puedo asegurar que sea así.
María: Este espacio siempre se lo dejo al lector para que cuente lo que crea oportuno o simplemente quiera que lo sepa el lector.
Randy Sandí Castro: Para finalizar, quisiera comentar que la novela surgió debido al impulso que mi estimada tutora de tesis me dio. Sin embargo, empezó como un pasatiempo, ya que no creía que la llegaría a publicar, pero en la medida que empecé a enviar los capítulos a lectores cero, estos me ofrecieron comentarios super positivos, lo que contribuyó e influyó en que creyera más en mi potencial. Es así como la historia comenzó a crecer, hasta lograr una trama muy interesante, enredada, pero entretenida, la cual hoy por hoy, es una realidad. Por eso quiero terminar con un consejo. Siempre luchen por los sueños y confíen en su potencial, ya que será muy importante para lograr las metas.
Bonito consejo.
Espero que les haya gustado la entrevista y gracias a ella hayan anotado este libro Enredado en sus sueños como próxima lectura.
Muchas gracias Randy. A vosotros lectores, os dejo leyendo un último fragmento de Enredado en sus sueños.
Un saludo.
Daniela, vecina de Dylan, excompañera de trabajo y otra gran amiga, abriría el tema a nuevas posibilidades. No dudó en visitarla tras finalizar el desfile, siempre ha sido su cómplice y una gran aliada. Ellos comparten el mismo punto de vista sobre los temas esotéricos.
Le contó detalladamente todo lo acontecido en esas últimas semanas.
—Creo que no se trata de que Sara esté buscando el perdón de su familia o de que sea un mensaje de rencor o culpa por la forma en que terminó con su vida —planteó Daniela.
—Exactamente eso creo —agregó Dylan—. A mí me sonó más a una advertencia de un peligro real e inminente.
—Además, me parece que pretende buscar ayuda. Ahora puede estar perdida o atrapada en su viaje al Más Allá, algo le habrá quedado inconcluso o precisamente por ese peligro que tú mencionas, no ha querido trascender.
—Yo tengo dando vueltas en la cabeza los gritos de auxilio y sé que no es la misma voz que la de Sara. O sea, el mensaje de ella fue muy claro y conciso, y pude reconocer su dicción fácilmente, pero con ese clamor de desesperación no sucede lo mismo y me resultan cada vez más lejanos.
—¿No crees que se deba a viajes astrales o a una posible correlación de tu sueño con el de otra persona? —preguntó Daniela.
—Tendría mucho sentido —expresó Dylan en tono reflexivo—. No era yo quien dominaba mi cuerpo —agregó aún más pensativo—. Por lo general, cuando sueño con lugares, estos me parecen familiares, como de mi infancia, pero esta vez resultó ser un sitio nuevo, conocido para la persona que me guiaba. Es difícil de explicar, como si me condujera hacia esa casa valiéndose de sus recuerdos.
Randy Sandí Castro. Enredado en sus sueños.
María Torres.
Conociendo al autor. Conversaciones.
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