Chemarea es el nombre de un corto proyecto creado por el joven Tzara en 1915 – una publicación que sirvió como canal de expresión del sentimiento anti-belicista, anti-nacionalista y anti-establishment imperante entre la juventud de la época. Esta revista es considerada -una vez más, al igual que Simbolul – un antes y un después de la expresión artística dentro de la sociedad rumana y europea.
El amor por la novedad es la cruz simpática, es prueba de un mimpotacarajismo ingenuo, signo sin causa, pasajero, positivo.
Tristán comenzó a cursar filosofía y matemáticas en la Universidad de Bucarest en 1914, pero no llegó a graduarse. En 1915 se muda a Zúrich, gesto de individualidad como respuesta ante una sociedad en guerra. Tzara deja de utilizar el rumano como el lenguaje en el que plasma sus ideas en papel – de ahora en adelante, escribirá en francés.
Yo escribo este manifiesto para demostrar que pueden ejecutarse juntas las acciones opuestas, en una sola y fresca respiración
En Zúrich Tzara trabó relación con los hermanos Janco (Marcel y Georges), así como con el poeta anarquista alemán Hugo Ball y su esposa, la poeta y performer Emmy Hannings. El matrimonio de artistas regentaba el Cabaret Voltaire, que pronto se convirtió en el punto de reunión de artistas, anarquistas y otros renegados. Tristán comenzó a recitar poesía en vivo. Es en este ambiente donde nace el Movimiento DADA.
La crítica es por lo tanto inútil, no existe más que subjetivamente, para cada uno, y sin el menor carácter de generalidad […]El principio ‘Ama al prójimo’ es una hipocresía, ‘Conócete’ es una utopía, pero más aceptable pues hay un contenido de maldad en ella. Ninguna piedad.
Existen diferentes historias acerca del momento exacto de nacimiento de Dada. Paul Cernat señala que la primera actuación Dada ocurrió en febrero de 1916, cuando Tristán, portando un monóculo, subió al escenario del Cabaret Voltaire cantando canciones románticas y comenzó a lanzar pelotitas de papel a unos escandalizados espectadores, para, a continuación, dar paso a un grupo de actores enmascarados subidos a zancos y, finalmente, retornar bajo los focos para cerrar su actuación vestido de payaso. Otras voces prefieren situar el origen del movimiento en las performances de artistas anteriores y que habrían servido de inspiración para el propio Tzara y sus actuaciones en el Cabaret Voltaire, como Alfred Jarry, Marcel Duchamp o Guillaume Apollinaire.
Así nació DADA, de una necesidad de independencia, de desconfianza para la comunidad […] Estamos hartos de las academias cubistas y futuristas: laboratorios de ideas formales.
En uno de los primeros manifiestos de la comunidad, Ball escribió que el único objetivo de la agrupación es poner el foco sobre algunos de los pocos espíritus libres que aún viven por ideales distintos a los que reinan en las sociedades nacionalistas y en guerra de la Europa de principios del siglo XX. La ambición de Ball era la de crear un magazine internacional que reuniese a los principales artistas del momento. El nombre de la publicación será, evidentemente, DADA.
Me gusta la obra antigua por su novedad. Tan sólo el contraste nos enlaza con el pasado.
En 1917 Ball y Tzara abrieron la primera exhibición permanente de la comunidad- la Galerie Dada, estableciendo contacto con el artista visual italiano Giorgio di Chirico, con el magazine expresionista alemán Der Sturm, o con el artista austro-húngaro Oskar Kokoschka, todos estos considerados como padres del movimiento. En 1918, los dadaístas de Zúrich establecen relación con algunos de los más prominentes y destacados artistas alemanes de ideología socialista, como Walter Mehring, George Grosz, Max Ernst o Johannes Baader.
La lógica siempre es falsa. Ella tira de los hilos de las nociones, palabras, en su exterior formal, hacia objetivos y centros ilusorios. […] Casado con la lógica, el arte viviría en el incesto, engullendo, tragándose su propia cola, fornicándose a sí mismo[…] Pero la soltura, el entusiasmo e inclusive el júbilo de la injusticia, esa pequeña verdad que nosotros practicamos con inocencia y que nos hace bellos […]
Con tantas nuevas conexiones, Tristán se decidió a crear lo que se llamó Presidentes Dada, representativos de los ideales del movimiento en diferentes regiones del viejo continente. Kruscek, Ernst, Vicente Huidobro, Rafael Lasso de la Vega. Stravinski. André Breton.
Todo producto del asco susceptible de convertirse en una negación de la familia, es dada; protesta con todas las fuerzas del ser en acción destructiva: DADA […] abolición de la lógica, danza de los impotentes de la creación: DADA; de toda jerarquía y ecuación social instalada para los valores por nuestros lacayos: DADA […] abolición de la memoria: DADA; abolición de la arqueología: DADA; abolición de los profetas: DADA; creencia absoluta indiscutible en cada dios producto inmediato de la espontaneidad: DADA […] escupir como una cascada luminosa el pensamiento chocante o amoroso, o mimarlo – con la viva satisfacción de que da igual […] Libertad: DADA DADA DADA, aullido de los dolores crispados, entrelazamiento de los contrarios y de todas las contradicciones, de los grotescos, de las inconsecuencias: LA VIDA.
Continuará … O no?
Texto de Tarek Morales – Citas extraídas de “Seven Dada Manifestos”, por Tristan Tzara, 1924